La red científica de la EFSA encargada del estudio de las Encefalopatías Espongiformes Transmisibles (EETs), ha publicado recientemente el informe anual.

Como en años anteriores, la EFSA se reúne con el resto de los participantes (EEMM y otros países, CE y la OIE) que forman esta red para compartir resultados y elaborar una opinión en torno a la situación de las EETs en la UE.

Los temas discutidos siguieron la línea de los del 2020, incluyeron:

  • CWD (enfermedad caquectizante del ciervo):
    • Suecia, presentó los resultados de su programa de vigilancia intensiva y compartió información de los casos positivos hallados en alces. Se destacó el compromiso en la participación en el programa de personas cazadoras.
    • Noruega, hizo una revisión de las medidas de control implantadas en los últimos 5 años.
  • Los resultados de una evaluación de riesgos sobre el levantamiento de la prohibición de los piensos:
      • Destacaron que, aparte de cualquier contaminación cruzada, el riesgo de reciclar una posible EET esporádica/espontánea en cerdos a través de la cadena alimentaria puede ser limitado. Y la conclusión fue que, una separación efectiva por especies a lo largo de la cadena de producción asociada a medidas de control y trazabilidad limita la posible amplificación de las EETs.
      • Se debatió el uso de insectos para la alimentación de cerdos y aves de corral. Se subrayó que el sustrato en el que se crían los insectos debe cumplir los requisitos reglamentarios sobre alimentación animal.
  • Se proporcionó una perspectiva histórica y se presentaron los resultados, sobre la prevalencia en Gran Bretaña de la proteína priónica anormal en los apéndices humanos.
  • La EFSA ante cuestiones relativas a al scrapie, concluyó, que tras 2 años de investigación y valorar los datos científicos sobre la vigilancia intensiva, no hay nuevas pruebas de que el scrapie atípico pueda transmitirse entre animales en condiciones naturales, y se considera más probable que sea una enfermedad no contagiosa, más que contagiosa.
  • Respecto a la encefalopatía espongiforme bovina (EEB), la OIE informó que actualmente hay 56 países y 5 zonas con un estatus oficial de riesgo de EEB. Dos nuevos miembros, Canadá e Irlanda, fueron reconocidos con un estatus de riesgo de EEB insignificante.